¿Es legal que te cobren IVA por el alimento de mascotas? Esto resolvió la Corte

Desde el año 2014 el gobierno federal impuso el Impuesto al Valor Agregado (IVA) al alimento para mascotas, generando un fuerte golpe a los propietarios de perros y gatos, pues no sólo aumentó el precio de las croquetas y los premios, sino que se incluyeron los productos destinados a otras pequeñas especies que sirven como mascotas.

Esta semana la Primera Sala de la Suprema Corte de la Justicia de la Nación (SCJN) negó un amparo contra la tasa del 16% de IVA que Hacienda mantiene sobre este tipo de alimentos procesados.

Con cuatro votos a favor, la Primera Sala reconoció la constitucionalidad de la Ley del Impuesto al Valor Agregado (IVA), conforme al cual se aplica la tasa del 16% a la compra de alimentos procesados para pequeñas especies que sirven de mascotas en los hogares.

Es decir, las croquetas, premios, sobres y latas con alimento húmedo, así como alimentos para otro tipo de animales que se mantienen en casa, como peces y tortugas, no son considerados para la tasa de 0% a la enajenación de productos de origen natural destinados a la alimentación humana y animal.

En el proyecto de la ministra Loreta Ortiz se argumentó que las personas que compran alimentos procesados para sus mascotas tienen el suficiente poder adquisitivo, además, que tienen la libertad de elegir otros productos más económicos.

Es decir, para los dueños que decidan alimentar a sus mascotas con productos primarios, que también son para consumo humano, se evitarán pagar el 16% de IVA. Así, el caldito de pollo natural que tradicionalmente se prepara en nuestro país seguirá siendo una opción libre de impuestos para acceder a nuestras mascotas.

De acuerdo con el fallo, la aplicación del Impuesto al Valor Agregado (IVA) al alimento procesado para perros, gatos y otras pequeñas especies que se utilicen como mascotas se alinea con el principio de legalidad tributaria, no violando los derechos de los contribuyentes ni la equidad tributaria.

Esta medida se justifica en el fomento de actividades primarias como la ganadería, la silvicultura y la pesca, con miras a aumentar la producción y la autosuficiencia alimentaria nacional.

La decisión fue tomada tras considerar que la ley no necesita especificar detalladamente qué se entiende por “pequeñas especies” ni “mascotas en el hogar”, ya que se considera que existe suficiente claridad para que los contribuyentes comprendan que la venta de este tipo de alimento está sujeta al gravamen correspondiente.

Además, se destacó que el diferenciar los alimentos procesados destinados a mascotas del resto de alimentos destinados a animales se ajusta al principio de equidad tributaria, al tiempo que promueve el consumo de alimentos no procesados fomentando así la producción primaria.

La sentencia también asegura que, al establecer una tasa del 0% de IVA para la enajenación de alimentos destinados a la alimentación animal (con la excepción de los alimentos procesados para mascotas), se hace posible el aumento de la producción y facilita la adquisición de alimentos naturales.

Se enfatiza que esta decisión permite que los ciudadanos mexicanos puedan asumir de manera efectiva el costo del impuesto al final del ciclo tributario, siendo considerados contribuyentes de facto dado que la compra de dichos alimentos procesados implica una capacidad económica para llevar la carga tributaria.

Finalmente, el Tribunal confirmó que el precepto legal aludido no constituye una ley privativa prohibida por la Constitución Federal, ya que su aplicación no se limita a un individuo específicamente sino que abarca a un número indeterminado de personas que realicen la venta de alimentos procesados para mascotas, garantizando así su universalidad y la no discriminación en su aplicación.