En el festival Arre, los Tigres del Norte demostraron que aún son los jefes de jefes

Jesús Abraham Hernández

Periódico La Jornada
Lunes 9 de septiembre de 2024, p. 8

Me gustan los corridos porque son hechos reales de nuestro pueblo. Sí, también me gustan porque en ellos se canta la pura verdad, dijo una voz en off antes de que los Tigres del Norte demostraran que son y serán los jefes de jefes en el Festival Arre, que se llevó a cabo este fin de semana en el autódromo Hermanos Rodríguez.

Acompañados de mariachis como preámbulo de los próximos festejos patrios, los hermanos Hernández sorprendieron a su público que, sin importar edad ni condición, coreó grandes éxitos como La puerta negra, Ni parientes somos o Contrabando y traición, además de un popurrí dedicado a Vicente Fernández.

El característico bajo de Hernán Hernández con banderas de todo el continente americano, anunció el acordeón que dio inicio a La jaula de oro, canción que aborda la realidad de los migrantes, tocando fibras en muchos asistentes, algunos de los cuales llevaban banderas de México y Estados Unidos.

Entre el público habían texanas y chamarras de cuero combinadas con tenis, botas y pantalones tumbados de los compas que tiraban taconazo en La Hacienda, escenario principal de la tocada.

Estas canciones las escuchaba con mis abuelitos y mis papás; crecimos con ellas y escucharlas en vivo es increíble, comentaron algunas asistentes. Mi papá fue un padre ausente; escuchaba a Los Tigres del Norte. Oírlos es incluso raro para mí; tengo sentimientos encontrados, añadió otro.

Con más de 50 millones de álbumes vendidos y siete premios Grammy, la agrupación nacida en 1968 sigue cosechando éxitos tras llevar a cabo este año su European Tour y llegar a Barcelona, Coruña, Bilbao y Pamplona luego de 14 años sin visitar España, además de tocar en también en Londres, demostrando que para la música mexicana no hay fronteras.

Bobby Pulido, apodado en días recientes Bowie Pulido, arrancó gritos y rugidos al interpretar Desvelado, que ya es considerada una oda a la nostalgia de los que están enamorados de su propia idea del amor, que van por las calles esperando encontrar a esa voz de ángel que quiero amar. Mientras, el mexicano-estadunidense Xavi, que a los 20 años colocó su canción La diabla en tercer lugar en la lista Billboard Global 200 por encima de Taylor Swift, demostró que el adultocentrismo, que antes reinaba el imperio de la música, ya no tiene lugar y dominó el escenario poniendo a cantar a los compas más sentimentales con temas como La víctima o Corazón de piedra.

Calculan 100 mil asistentes

La primera edición de este festival, en 2023, reunió 70 mil almas. En la presente, en cuya segunda jornada contó con la participación de K-Paz de la Sierra, Banda Los Recoditos, Nortec: Bostich + Fussible, Lalo Mora y Junior H, los organizadores proyectaron más de 100 mil asistentes durante los dos días.

La llamada música regional mexicana siempre ha sido muy escuchada, pero gracias a exponentes como Junior H, Tito Double P, entre otros, ahora goza de mucha popularidad entre el público joven, que no olvida a clásicos como los Invasores de Nuevo León, La Única Internacional Sonora o Chico Che Chico.

Éste último, en entrevista con este periódico (https://shorturl.at/2YW90) prometió un espectáculo con las canciones más famosas de su padre Chico Che (1945-1989), retomando su bigote, overol y ritmo tropical, lo que cumplió al interpretar Quén pompó, La crisis y Uy, qué miedo, que recientemente se viralizaron debido a que el presidente López Obrador hizo sonar esta última en sus conferencias matutinas.

Antes, la fortaleza norteña se hizo presente con la agrupación Cardenales de Nuevo León y su vocalista Cesáreo Sánchez, conocido como El cardenal mayor, quien se presentó en silla de ruedas al festival, debido a un infarto cerebral. 

Conmovido por el recibimiento del público chilango, no se guardó nada y desde el comienzo puso a sonar los vientos y las cuerdas con su canción Belleza de cantina, a la que siguieron Mi cómplice y Necesito decírtelo, entre otras.

En tanto, con temas como El Niño, El día de nuestra suerte o Bendiciones pa’ los míos, el rapero Eme Malafe reflexionó en el escenario Tecate Original sobre el sentido de la vida, su fugacidad y las lecciones que dejan el rap, el reggae y el folk urbano.