«El peso digital es el primer paso hacia un totalitarismo digital»

Victoria Villarruel, diputada nacional (La Libertad Avanza) y candidata a vicepresidente de Argentina por la fórmula que encabeza Javier Milei, sostiene que «el peso digital bajo control central estatal es el primer paso hacia un eventual totalitarismo digital».

La abogada escribió esas palabras ayer, 6 de octubre, en su cuenta de la red social X. Lo hizo en referencia a la propuesta del candidato presidencial Sergio Massa (Unión por la Patria). Tal como CriptoNoticias reportó el domingo pasado, Massa prometió que, si gana la contienda electoral, su gobierno pondrá en marcha una moneda digital argentina.

Villarruel sostiene que el control estatal de una moneda digital de banco central (o CBDC, por sus siglas en inglés), «sea por corrupción o falta de medidas de seguridad eficientes», podría ser utilizado de formas perjudiciales para los habitantes de argentina. Menciona, específicamente 7 malos usos que el Estado le podría dar a un peso digital:

«Podría ser utilizado para vulnerar tu privacidad, coaccionarte, robarte, determinar arbitrariamente en qué podés gastar tu dinero, ejecutar corralitos exprés, realizar emisiones de dinero exprés y, en definitiva, someterte a una esclavitud económica a través de la tecnología».

Victoria Villarruel, diputada nacional y candidata a vicepresidente de Argentina.

Añade Villarruel: «En su momento denunciamos el control estatal de las historias clínicas. Hoy lo denunciamos para la moneda. La libertad financiera no se negocia. No a la CBDC».

Las palabras de la política argentina van en el mismo sentido que las que pronunciara ayer Alberto Boada, secretario del Banco de la República de Colombia. Según este funcionario, «las CBDC son el Gran Hermano que no garantiza la privacidad».

Actualmente, hay varios países explorando la posibilidad de lanzar una CBDC. Incluso, algunos de ellos, por ejemplo, Bahamas, ya tienen instrumentos así en funcionamiento. Otros, como es el caso de China, están en etapa avanzada de pruebas. En todos los casos, los cuestionamientos sobre privacidad financiera y seguridad son tema de extensos debates.