Titanic: lo que hemos aprendido (y perdido) desde que se hallaron los restos del naufragio

ndh
By ndh
3 Min Read

Otros también realizaron visitas turísticas a los restos del naufragio. En 2001, una pareja estadounidense se casó en un buque de investigación ruso mientras sobrevolaba cerca de la cubierta submarina del Titanic. En 2002, la empresa estadounidense Bluefish empezó a ofrecer a los turistas inmersiones en las profundidades del pecio. Deep Oceans ofreció su última excursión en 2012, año en que se conmemoraba el centenario de la catástrofe, en medio de llamamientos de los conservacionistas para que se pusiera fin al turismo del naufragio.

“No tengo ningún problema con que la gente vaya al Titanic, tengo un problema con que la gente lo destruya”, dijo Ballard a National Geographic en una entrevista de 2012 sobre el fenómeno. “Tenemos pruebas irrefutables de todo tipo de daños. Tenemos un mosaico fotográfico del barco antes de que aparecieran los submarinos, y podemos mostrarte dónde han embestido el barco. Podemos mostrar dónde derribaron la cofa”.

En 2010, un grupo de socios gubernamentales y privados (entre ellos el RMS Titanic y el Instituto Oceanográfico Woods Hole de Massachusetts) se propuso crear un mapa arqueológico detallado del pecio para analizar el deterioro que ya se había producido y determinar cuánto tiempo podría durar. Una combinación de factores naturales (como los microbios que forman comunidades en el pecio) y no naturales (como los sumergibles humanos que perturban la cofa) ya había provocado cambios visibles en el lugar.

“Algunas personas creen que la proa se derrumbará en uno o dos años”, dijo Bill Lange, director de la Institución Oceanográfica Woods Hole en una entrevista de 2010 con National Geographic antes del colapso de la proa. “Pero otros dicen que va a estar ahí durante cientos de años”.

Una vez que los restos del Titanic cumplieron 100 años en abril de 2012, alcanzaron los requisitos para ser protegidos por una convención de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco, por sus siglas en inglés). 

Esto significa que los Estados que han ratificado la Convención sobre el Patrimonio Cultural Subacuático de 2001 pueden aprobar leyes contra el saqueo, la venta o la destrucción de los restos. También pueden cerrar sus puertos a los buques que infrinjan el tratado.

Sin embargo, Estados Unidos, el Reino Unido y Canadá nunca ratificaron la Convención, por lo que continuaron las controversias sobre el turismo, el salvamento y los derechos de propiedad de los artefactos del Titanic.

DERECHOS DE AUTOR
Esta información pertenece a su autor original y fue recopilada del sitio https://www.nationalgeographicla.com/historia/2025/08/titanic-lo-que-hemos-aprendido-y-perdido-desde-que-se-hallaron-los-restos-del-naufragio

TAGGED:
Share This Article