Fuente: Agencia México
Hollywood está habituado a las transformaciones físicas de sus intérpretes, pero pocas han causado tanto impacto como la de Channing Tatum en su más reciente proyecto cinematográfico, Roofman. Con 45 años, el actor se sometió a un cambio drástico que lo llevó a perder más de 32 kilos para dar vida a Jeffrey Manchester, un ladrón cuya historia real supera los límites de la ficción.
La cinta, dirigida por Derek Cianfrance, se inspira en la sorprendente vida de Manchester, quien tras fugarse de prisión logró ocultarse durante seis meses dentro de las paredes de una tienda Toys “R” Us en Carolina del Norte. Durante ese periodo, se convirtió en una sombra: dormía en el techo, se alimentaba de los productos y evitaba ser descubierto por completo. Su relato, definido por una mente calculadora y una capacidad de adaptación extrema, demandaba un actor que transmitiera tanto vulnerabilidad física como complejidad emocional.

Tatum venía de encarnar a un personaje robusto en Josephine, donde alcanzó los 106 kilos. Para Roofman, su meta inicial era llegar a 84, pero terminó descendiendo hasta los 78. “Jeffrey no era musculoso. Era alguien que sobrevivía en espacios pequeños, que se escabullía por ductos de ventilación y se escondía entre muros. Yo tenía que aparentar eso”, comentó en entrevista. La transformación fue tan radical que alarmó al equipo de producción. Mary Ellis, asistente de dirección, le dijo: “Basta, hay que darle un filete ya mismo”. El director Cianfrance apoyó la entrega del actor, aunque reconoció que el cambio físico superó lo planeado.
El proceso no solo impactó su cuerpo, sino también su mente. “Todo ese vacío y tristeza del personaje también me alcanzaron. Me miraba al espejo y me veía desmoronándome”, confesó Tatum. El aislamiento de Manchester en la trama terminó siendo una vivencia personal para él, describiendo el rodaje como “un contacto permanente con la soledad”.
Con ayuda de entrenadores, nutriólogos y chefs, el actor siguió un plan estricto. En redes sociales compartió imágenes del antes y después, agradeciendo a su equipo y asegurando que no volverá a aceptar papeles que requieran aumentar tanto de peso: “Es demasiado pesado para el cuerpo y muy complicado de revertir”.

Roofman ya está filmada y su estreno global está previsto para noviembre de 2025, con funciones especiales en festivales como Toronto y Berlín. La industria observa con interés no solo la historia, sino también el compromiso de Tatum. Su radical transformación ha sido comparada con las de Christian Bale o Matthew McConaughey, aunque con un tono más introspectivo y emocional.
La historia de Roofman no solo retrata a un ladrón ingenioso, también muestra a un actor que fue más allá del método, poniendo cuerpo y mente al servicio de una narrativa que exige entrega absoluta. Channing Tatum no solo interpretó a Jeffrey Manchester: lo habitó. Y en ese trayecto, dejó una huella imborrable en su carrera.
Fuente: AGencia México
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