JULIANNE MOORE, LA HISTORIA DE UNA CARRERA DE FONDO

La actriz estadounidense es una de las pocas intérpretes que ha conseguido los premios más importantes y codiciados de la industria cinematográfica, además de alzarse con galardones de los principales festivales internacionales. Primero como actriz de reparto y, después, en papeles protagonistas, ha conseguido llegar a lo más alto con constancia. Ahora cumple 65 años.

La historia de esta actriz norteamericana no es la de quien ha heredado un legado artístico familiar. Su padre fue coronel del ejército de los Estados Unidos y su madre, trabajadora social y psicóloga. Tampoco fue una actriz “descubrimiento”; su carrera ha sido forjada a partir de papeles de reparto, comenzando a una edad poco habitual, con 32 años.

Sin embargo, con su trabajo continuado, sin ocupar grandes titulares y con una presencia elegante pero discreta, es considerada una de las mejores intérpretes de su generación y ha sido reconocida internacionalmente con multitud de galardones. Entre ellos destacan un premio Óscar, varios Globos de Oro, un premio Bafta, la Copa Volpi del Festival Internacional de Cine de Venecia, el Oso de Plata del Festival de Cine de Berlín y el premio a Mejor Actriz en el Festival Internacional de Cine de Cannes.

De camarera a actriz.

Cuando llegó el primer papel importante en cine para Julianne Moore, ya había cumplido 32 años. Hasta entonces había compatibilizado, como muchas otras aspirantes del sector, la formación como actriz y el desfogue en las tablas con un trabajo como camarera en Nueva York.

Su primera oportunidad llegó con el thriller “La mano que mece la cuna” (Curtis Hanson, 1992), formando parte del reparto del film. Así sería también para “El cuerpo del delito” (Uli Edel, 1993), película que quiso seguir la estela del film del momento, “Instinto básico” (Paul Verhoeven, 1992). En “El cuerpo del delito”, la protagonista fue Madonna, y la interpretación de Julianne Moore, en un papel secundario, fue especialmente destacada por la crítica.

Seguirían papeles de reparto en importantes títulos de la época, como “El fugitivo” (Andrew Davis, 1993), hasta que comenzaron sus primeras apariciones como protagonista. Fue en 1997 cuando Julianne Moore se hizo visible al gran público con su protagonista en “Jurassic Park: The Lost World” (Steven Spielberg) y en su siguiente título, “Boogie Nights” (Paul Thomas Anderson, 1997), con el que consiguió sus primeras nominaciones a los Óscar y Globos de Oro de ese año.

Su carrera hacia los Óscar y el triunfo.

La dilatada trayectoria de Julianne Moore, junto a un físico inquebrantable, siguió sumando papeles protagonistas y de reparto que fueron celebrados internacionalmente por su importante solvencia en sus interpretaciones. Finalizando los años 90 y en los primeros años 2000, no dejaron de sucederse nominaciones y premios para esta actriz en títulos icónicos de la época.

La historia de esta actriz norteamericana no es la de quien ha heredado un legado artístico familiar. Su padre fue coronel del ejército de los Estados Unidos y su madre, trabajadora social y psicóloga. Tampoco fue una actriz “descubrimiento”; su carrera ha sido forjada a partir de papeles de reparto, comenzando a una edad poco habitual, con 32 años.
Sin embargo, con su trabajo continuado, sin ocupar grandes titulares y con una presencia elegante pero discreta, es considerada una de las mejores intérpretes de su generación y ha sido reconocida internacionalmente con multitud de galardones. Entre ellos destacan un premio Óscar, varios Globos de Oro, un premio Bafta, la Copa Volpi del Festival Internacional de Cine de Venecia, el Oso de Plata del Festival de Cine de Berlín y el premio a Mejor Actriz en el Festival Internacional de Cine de Cannes.

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De camarera a actriz.
Cuando llegó el primer papel importante en cine para Julianne Moore, ya había cumplido 32 años. Hasta entonces había compatibilizado, como muchas otras aspirantes del sector, la formación como actriz y el desfogue en las tablas con un trabajo como camarera en Nueva York.
Su primera oportunidad llegó con el thriller “La mano que mece la cuna” (Curtis Hanson, 1992), formando parte del reparto del film. Así sería también para “El cuerpo del delito” (Uli Edel, 1993), película que quiso seguir la estela del film del momento, “Instinto básico” (Paul Verhoeven, 1992). En “El cuerpo del delito”, la protagonista fue Madonna, y la interpretación de Julianne Moore, en un papel secundario, fue especialmente destacada por la crítica.
Seguirían papeles de reparto en importantes títulos de la época, como “El fugitivo” (Andrew Davis, 1993), hasta que comenzaron sus primeras apariciones como protagonista. Fue en 1997 cuando Julianne Moore se hizo visible al gran público con su protagonista en “Jurassic Park: The Lost World” (Steven Spielberg) y en su siguiente título, “Boogie Nights” (Paul Thomas Anderson, 1997), con el que consiguió sus primeras nominaciones a los Óscar y Globos de Oro de ese año.

Su carrera hacia los Óscar y el triunfo.

La dilatada trayectoria de Julianne Moore, junto a un físico inquebrantable, siguió sumando papeles protagonistas y de reparto que fueron celebrados internacionalmente por su importante solvencia en sus interpretaciones. Finalizando los años 90 y en los primeros años 2000, no dejaron de sucederse nominaciones y premios para esta actriz en títulos icónicos de la época.

En 2002 se alzaba con la Copa Volpi del Festival Internacional de Cine de Venecia por la película “Lejos del cielo” (Todd Haynes). Moore se metía en la piel de un ama de casa de los años 50 que respondía fielmente a lo que se esperaba de ella, mientras le rodeaba un opresivo ambiente de xenofobia y homofobia. Por esta interpretación fue nominada a los Óscar de ese año, nominación que duplicó como Mejor Actriz de Reparto por la película “Las horas” (Stephen Daldry).

En este film, su interpretación de una mujer felizmente casada que cambia de rumbo su vida al leer “Mrs. Dalloway”, de Virginia Woolf, fue reconocida junto a las otras dos protagonistas de la película, Nicole Kidman y Meryl Streep, con el galardón a Mejores Actrices en la Berlinale de 2003.

El primer Globo de Oro para esta actriz llegó en 2013 con su interpretación de Sarah Palin para la película de HBO “Game Changes”. El film para televisión se centraba en la campaña para la Presidencia de los Estados Unidos de 2008, donde se elegía a Sarah Palin como candidata a la vicepresidencia por John McCain.

El papel interpretado por Julianne Moore fue muy celebrado por la industria audiovisual y, por el contrario, muy criticado por parte de la propia Sarah Palin, que consideró que el carácter nervioso que reflejaba el personaje basado en ella misma no respondía a la realidad. Cuando fue preguntada por la prensa sobre su opinión acerca de la película, no dudó en responder: “Todo es falso y siento que millones de personas van a perder su tiempo viendo la película. Nunca estuve en ese estado de nervios”.

Pero la película que terminó de colocar a Julianne Moore en el Olimpo de la interpretación fue “Siempre Alice” (Richard Glatzer y Wash Westmoreland, 2014). Basada en el bestseller del mismo título de la escritora Lisa Genova, cuenta la historia de una mujer

intelectualmente brillante que sufre alzhéimer precoz. Con su magistral interpretación logró su primer premio Óscar, un Globo de Oro, el Bafta y el premio del Sindicato de Actores, entre otros muchos reconocimientos.

Aunque, en los últimos años, esta actriz ha trabajado fundamentalmente en cine, uno de los últimos títulos, “La habitación de al lado” (Pedro Almodóvar, 2024), no evita papeles para televisión. Este ha sido el caso de la serie de Netflix “Sirenas” (Nicole Case, 2025). En la presentación de esta última serie comentó a la prensa cuál es la decisión que la mueve al aceptar un proyecto, y es aquella historia que trate de las relaciones entre personas.
Julianne Moore cumple 65 años siguiendo una trayectoria profesional que parece no tener fin, como su físico, que parece estar detenido en el tiempo.
Carmen Jiménez.
EFE REPORTAJES

En 2002 se alzaba con la Copa Volpi del Festival Internacional de Cine de Venecia por la película “Lejos del cielo” (Todd Haynes). Moore se metía en la piel de un ama de casa de los años 50 que respondía fielmente a lo que se esperaba de ella, mientras le rodeaba un opresivo ambiente de xenofobia y homofobia. Por esta interpretación fue nominada a los Óscar de ese año, nominación que duplicó como Mejor Actriz de Reparto por la película “Las horas” (Stephen Daldry).

En este film, su interpretación de una mujer felizmente casada que cambia de rumbo su vida al leer “Mrs. Dalloway”, de Virginia Woolf, fue reconocida junto a las otras dos protagonistas de la película, Nicole Kidman y Meryl Streep, con el galardón a Mejores Actrices en la Berlinale de 2003.

El primer Globo de Oro para esta actriz llegó en 2013 con su interpretación de Sarah Palin para la película de HBO “Game Changes”. El film para televisión se centraba en la campaña para la Presidencia de los Estados Unidos de 2008, donde se elegía a Sarah Palin como candidata a la vicepresidencia por John McCain.

El papel interpretado por Julianne Moore fue muy celebrado por la industria audiovisual y, por el contrario, muy criticado por parte de la propia Sarah Palin, que consideró que el carácter nervioso que reflejaba el personaje basado en ella misma no respondía a la realidad. Cuando fue preguntada por la prensa sobre su opinión acerca de la película, no dudó en responder: “Todo es falso y siento que millones de personas van a perder su tiempo viendo la película. Nunca estuve en ese estado de nervios”.

Pero la película que terminó de colocar a Julianne Moore en el Olimpo de la interpretación fue “Siempre Alice” (Richard Glatzer y Wash Westmoreland, 2014). Basada en el bestseller del mismo título de la escritora Lisa Genova, cuenta la historia de una mujer intelectualmente brillante que sufre alzhéimer precoz. Con su magistral interpretación logró su primer premio Óscar, un Globo de Oro, el Bafta y el premio del Sindicato de Actores, entre otros muchos reconocimientos.

Aunque, en los últimos años, esta actriz ha trabajado fundamentalmente en cine, uno de los últimos títulos, “La habitación de al lado” (Pedro Almodóvar, 2024), no evita papeles para televisión. Este ha sido el caso de la serie de Netflix “Sirenas” (Nicole Case, 2025). En la presentación de esta última serie comentó a la prensa cuál es la decisión que la mueve al aceptar un proyecto, y es aquella historia que trate de las relaciones entre personas.
Julianne Moore cumple 65 años siguiendo una trayectoria profesional que parece no tener fin, como su físico, que parece estar detenido en el tiempo.

Carmen Jiménez.
EFE REPORTAJES