Nueva York se vistió de gala con un aire de intriga y glamour para recibir la proyección especial de The Thursday Murder Club, la más reciente apuesta cinematográfica de Netflix. El evento tuvo lugar en un escenario que encierra décadas de historia y elegancia: el Oak Room del Plaza Hotel en Manhattan, un espacio que con sus cortinas pesadas, columnas de madera y luz tenue evocó la atmósfera perfecta para sumergirse en un relato cargado de misterio y humor inteligente.

La película, dirigida por Chris Columbus, narra las aventuras de un grupo de jubilados que encuentran en la resolución de crímenes un pasatiempo peculiar, hasta que se ven envueltos en una investigación real. Con un elenco de lujo encabezado por Pierce Brosnan, Helen Mirren y Sir Ben Kingsley, la producción combina suspenso, ingenio y una mirada entrañable a la vitalidad en la tercera edad, desafiando los estereotipos y ofreciendo una historia fresca, divertida y profundamente humana.

La velada en el Oak Room no solo reunió al elenco y al director, también atrajo a figuras destacadas de la industria y ejecutivos de Netflix. El ambiente fue íntimo, casi teatral, donde cada detalle —desde la alfombra roja hasta la disposición de las mesas— contribuyó a la sensación de que se trataba de un evento único, diseñado para rendir homenaje tanto a la película como a la tradición del cine británico.
Uno de los momentos más comentados fue la aparición de Pierce Brosnan junto a su hijo Dylan. El actor, elegante como siempre, se mostró emocionado por el proyecto y destacó la complicidad que encontró en sus compañeros de reparto: “Compartir escena con Dame Helen y Sir Ben fue poderoso… y tan fácil, porque todos venimos del teatro”, señaló. Brosnan definió la cinta como una “historia de amor entre cuatro personas vibrantes, apasionadas por la vida”, un reflejo fiel de la esencia que transmite la obra.

Por su parte, Helen Mirren, con su habitual magnetismo, agradeció la oportunidad de dar vida a un personaje que combina astucia con un sutil sentido del humor, mientras que Sir Ben Kingsley destacó la importancia de producciones como esta, que logran atraer tanto a nuevas generaciones como a públicos más maduros.
El director Chris Columbus, conocido por su habilidad para combinar lo fantástico con lo entrañable, subrayó que la adaptación de la novela homónima era un reto necesario: “Se trata de contar una historia sobre comunidad, resiliencia y el deseo de mantenerse curioso, sin importar la edad”, dijo.

La elección del Oak Room resultó más que acertada: un salón cargado de historia, que alguna vez fue epicentro de la vida cultural de Manhattan, ahora se convirtió en el telón de fondo ideal para un relato que celebra la camaradería, el ingenio y la capacidad de reinventarse. La noche dejó claro que The Thursday Murder Club no es solo una comedia de misterio, sino también un homenaje a la amistad y al poder de la imaginación.
El estreno global en Netflix está programado para el 28 de agosto, y la expectativa es alta. La cinta promete conquistar a un público diverso, desde los amantes de las historias policiacas hasta quienes buscan una comedia con corazón. La proyección en Nueva York fue apenas el primer capítulo de lo que podría convertirse en un fenómeno cultural: un recordatorio de que el misterio, cuando se acompaña de humor y humanidad, nunca pasa de moda.
Con un debut cargado de estilo, The Thursday Murder Club llega para demostrar que el suspenso también puede ser elegante, entrañable y profundamente divertido. Imágenes: Clasos
DERECHOS DE AUTOR
Esta información pertenece a su autor original y se encuentra en el sitio https://revistaq.mx/espectaculos/el-misterio-llega-a-manhattan-netflix-presenta-the-thursday-murder-club-en-el-historico-oak-room/