Así es como los ‘spas de cerveza’ están conquistando el mundo

La cerveza es la primera bebida inventada por la humanidad. Legendario fue el momento en que algún genio se cansó de tomar agua y comenzó a diseñar un líquido más divertido que cambiaría la historia para siempre. Su invención precede cualquier otra innovación importante, incluyendo la escritura, la cerámica, los granos domesticados e incluso los primeros pueblos. Y parece haber sido inventada independientemente en múltiples lugares alrededor del mundo.

Solo era cuestión de tiempo para que algún aficionado decidiera bañarse en cerveza. Resultó ser una gran idea, ya que las sustancias que la componen benefician la salud de la piel, mejoran la calidad del sueño, entre otros bienes. Los primeros spas de cerveza fueron creados en República Checa en los años ochenta. Un país que ostenta uno de los récords más admirables de la historia. Por más de treinta años ha sido el mayor consumidor de cerveza de todo el mundo. Consumiendo el doble per capita que el país que ocupa el segundo lugar, Austria.

La experiencia es muy similar a la de visitar un spa común y corriente, solo que mucho más divertida. La idea es que te sumerjas en una tina llena de cerveza, aunque no se trata de cerveza exactamente, sino de muchos de sus componentes afinados y concentrados en cantidades que resultan beneficiosas para el cuidado de tu piel, de tus músculos y de tu circulación. Es decir que no te la puedes tomar, o sea técnicamente si puedes, pero el sabor sería terrible. Pero no te preocupes, cada tina viene acompañada de un dispensador lleno de cerveza premium que sí te puedes tomar.

Un fenómeno cada vez más global

Los spas de cerveza están convirtiéndose en un fenómeno bastante rentable en los Estados Unidos. Orlando, Chicago, Denver, Maryland, la lista sigue, todos estos lugares cuentan con establecimientos inspirados en la iniciativa europea de bañarse en cerveza. No es una sorpresa que estén encontrando el éxito, ya que la cerveza es la bebida alcohólica que más se consume en el país norteamericano. La mayoría de los paquetes individuales en estos spas rondan los 100 $.

Se trata de una tendencia global, con exponentes ubicados en Islandia, el Reino Unido, Francia, Bélgica, ocho en España y la lista sigue creciendo. Se cree que su popularidad proviene de la combinación entre la experiencia tradicional de visitar un spa y la disponibilidad de la cerveza. Ya que visitar un spa suele considerarse como una actividad exclusivamente femenina, la presencia de la cerveza llama la atención de los hombres, haciendo posible que estos sitios se llenen de parejas buscando algo diferente.

Se ha comprobado científicamente que diversos componentes de la cerveza, como el lúpulo y la cebada, pueden beneficiar la apariencia de la piel, como reducir los niveles de estrés. Por eso, la experiencia de visitar estos spas de cerveza no solo será divertida, sino que también comprende muchos de los beneficios asociados con visitar un spa tradicional. Una alternativa fascinante, con mucho potencial para seguir expandiéndose por el mundo.