Díaz-Canel regresa a Cuba tras asistir a Asamblea General de la ONU

Ya estamos en la Patria, ¡dicha grande!, anunció el mandatario en su cuenta en la red social X.

En un encuentro celebrado la víspera con diplomáticos cubanos, Díaz-Canel destacó que el trabajo realizado en Naciones Unidas «además de ratificar el éxito de la recién concluida Cumbre de jefes de Estado y de Gobierno del G77 en La Habana, constituyó una vez más un respaldo a la lucha de la Mayor de las Antillas contra el injusto bloqueo y la inclusión de la Isla en la lista de estados supuestamente patrocinadores del terrorismo».

En sus intervenciones en la Asamblea General, el jefe de Estado denunció el impacto de las restricciones unilaterales para el desarrollo y cumplimiento de la Agenda 2030 de los países del Sur.

Calificó de crítico el contexto global para las naciones en desarrollo, afectadas por «un orden económico injusto que perpetúa las desigualdades y la pobreza».

Incluso antes de la pandemia de la Covid-19, el mundo ya se había desviado del camino hacia el logro de la Agenda 2030, advirtió.

Durante una intensa semana de actividades en el marco de la Asamblea General, donde alzó su voz por su país y por el G77 y China, el jefe de Estado cubano se reunió con su homólogo de Kenia, William Ruto y con representantes de Vietnam y Santa Lucía.

También sostuvo encuentros con la vicepresidenta de Uganda, Jessica Alupo, con su par de Argelia, Abdelmadjid Tebboune; así como con el titular designado de la COP28, el Sultán Al Jaber, y el ministro de Turismo de Arabia Saudita, Ahmed bin Aqeel Alkhateeb.

Asimismo, dialogó con representantes de sectores como la ciencia, la cultura, la salud pública, empresarios y emigrados cubanos.

La víspera, Díaz-Canel participó en un encuentro de solidaridad con Cuba y Venezuela, acogido por la Sociedad para Cultura Ética de Nueva York.

En ese espacio, el presidente cubano agradeció las muestras de solidaridad recibidas y aseguró que la «resistencia creativa del pueblo cubano ha demostrado que el imperialismo no tiene capacidad para doblegar nuestra voluntad ni quebrar el compromiso de nuestro pueblo con la Revolución y el Socialismo».

jha/mks