Escrivá detalla las razones de la medida

El recién anunciado Sistema de verificación de edad para el acceso a contenidos en línea ha causado mucha polémica desde su anuncio. En parte, por las preocupaciones sobre cómo funcionará realmente este proceso de confirmación de la mayoría de edad en las páginas de contenido para adulto, y más concretamente sobre el límite de 30 accesos que permitirá este mecanismo.

Más allá de las dudas e incógnitas sobre el también conocido como ‘Pajaporte’, lo cierto es que este sistema de verificación de edad no es del todo una mala idea. De hecho, hay una serie de motivos por el que algo así se está implementando en España, y el propio José Luis Escrivá, ministro para la Transformación Digital y de la Función Pública de España, los ha detallado en su perfil oficial de X (Twitter).

En concreto, el Sistema de verificación de edad para el acceso a contenidos en línea o ‘Pajaporte’ está destinado a la protección de aquellos menores de edad que buscan acceder al contenido para adulto, cuyas restricciones actuales son prácticamente inexistentes. De hecho, la gran mayoría únicamente pide aceptar que el usuario que visita la página cumple con la mayoría de edad. Esto no impide que los menores accedan a contenido pornográfico de forma habitual; 7 de cada 10 lo hacen, explica Escrivá, y de media, muchos de ellos acceden por primera vez a los 9 u 11 años.

El impacto de la pornografía en los menores es un grave problema

El acceso a contenido pornográfico por parte de menores también influye en el comportamiento de los mismos. El ministro explica, que el 90 % de los jóvenes cree que este tipo de contenido se asemeja a la sexualidad real, y que para 1 de cada 3 menores “es su única fuente de información afectivo-sexual”. Es un problema si tenemos en cuenta que gran parte del contenido para adulto que se expone en estas páginas es contenido dominante que denigra a la mujer.

En relación con esto último, Escrivá asegura que se ha contrastado que “las agresiones sexuales cometidas por menores se han más que duplicado en los últimos años” y que “una creciente evidencia vincula a la pornografía con ello”. Esto, sin embargo, no es del todo cierto, pues no hay evidencias de que las agresiones sexuales por parte de menores esté vinculado al consumo de contenido para adultos.

El ‘Pajaporte’ no pretende limitar el consumo a los adultos

El ‘Pajaporte’, por tanto, no pretende controlar el consumo de los adultos a este contenido, sino que, reiteramos, evitar que los menores accedan a él. El Sistema de verificación de edad para el acceso a contenidos en línea es solo un proceso de comprobación a través de un mecanismo de identificación digital que ya utilizan 20 millones de españoles —ya sea Cl@ve, el DNI-e o los certificados electrónicos—, tal y como asegura el ministro Escrivá.

Dicho de otro modo, es un pequeño esfuerzo —puesto a que el proceso de verificación es un paso adicional para poder acceder a estas webs— que los adultos deberán realizar con el objetivo de proteger a los menores ante los peligros de consumir este tipo de contenido a una temprana edad.

No obstante, continúan habiendo muchas dudas sobre el número de accesos y lo que supone el conocido como ‘Pajaporte’ en cuanto a privacidad y seguridad del usuario mayor de edad que la utiliza para ver este contenido. Escrivá asegura que con este sistema es imposible “trazar al usuario”, pese a que el Gobierno explica en las especificaciones técnicas de la herramienta que las acreditaciones se expiden a través de un servidor. Esto hará que puedan saber quién las solicita, pero, eso sí, no a qué sitios acceden.