Noticias de Hoy
Los mejores medios en uno solo

La caballada está flaca…

146

DESDE EL PORTAL

MARCELA PRADO REVUELTA

            «La caballada está flaca», dijo Rubén Figueroa Figueroa, siendo Gobernador del sufrido estado de Guerrero, refiriéndose a los precandidatos del PRI, en las elecciones presidenciales de 1976, que ganó José López Portillo. Me reí buen rato, recordando aquellas broncas.

            La «corcholatiza», que andaba por los suelos, ha sido resuelta por el mando del bastón o al revés, cuando se cambió el «dedazo» por el «bastonazo»; no entiendo gran cosa de estas cuestiones.

            Y, aparentemente, las «tribus» de las que me reí alegremente hace unos días, han resuelto también el asunto, a nivel federal, donde los mexicanos elegiremos un Presidente de la República, 128 Senadores y 500 Diputados Federales. Pero… señoras y señores, se avecinan las elecciones para Gobernador de la Ciudad de México, Chiapas, Guanajuato, Jalisco, Morelos, Puebla, Tabasco, Veracruz y Yucatán. Nueve estados de nuestra República…

            Pero la vieja frase de Figueroa sobre la «flaca caballada», me hizo, otra vez, clavarme en mis viejos libros y recordar que Bucéfalo, el caballo de Alejandro Magno, (cuyo nombre en griego significa «cabeza de buey»), ha sido quizá el más famoso caballo de la antigüedad, aunque inmediatamente me puse a cantar, a grito pelado, «Siete Leguas, el caballo, que Villa más estimabaaa», y recordar al «As de Oros«, el caballo de Emiliano Zapata y al viejo y cansado Rocinante, de don Quijote y al Pegaso, el caballo de Zeus y a mi querido Babieca del Cid Campeador y al «Caballo de Troya«, por supuesto, y, de las viejas películas en blanco y negro, a Tornado, el caballo de El Zorro o a Silver, el caballo del guapo Llanero Solitario, y a Sombragris, el caballo de Gandalf, el personaje de Tolkien, y hasta recordé a Perdigón, el caballito de Toy Story, por culpa de mis nietos. Disfruté la mañana…

            Hasta que recordé que estamos en «preselección de precandidatos y precandidotes morenitos», para la Gubernatura de este mi sufrido, en este momento, Estado de Veracruz… Y de otros ocho Estados de la República… Se me pasó la risa y me eché a llorar, en medio de un ataque de cólera civil…

            Porque «esta caballada» no está nada flaca, incluyendo a las yeguas, (algunas de las cuales no nacieron en Veracruz). Está más bien gorda, (gracias a la explotación de los impuestos que pagamos los ciudadanos de bien, para su «bienestar»), morenitos de «envidia social», hechos bolita, «anoroñados», (esos que parece que no se bañan y no se rasuran nuncamente). Y esta caballada no conquista, como Bucéfalo o Babieca. No filosofa como Rocinante. No ayuda a la justicia, como Silver y Tornado y no se parece, para nada, al Siete Leguas o al As de Oros, de aquellos personajes de nuestra historia… Para nada.

            Más bien, me percaté, se parecen al «Caballo de Troya», ese mitológico caballo de madera, gracias al cual «ardió Troya» y se armó la tremolina histórica, ese caballo del que se habla en La Odisea de Homero y la Eneida de Virgilio. Ese caballo traidor…

            Entra el Caballo de Troya con sus rueditas de las limosnas, con cara de inocencia, pobre caballito. Y, a las quinientas de la noche, los guerreros aqueos abren las puertas y cae Troya…

            Así estamos. A punto de dar entrada al «Caballo de Troya». Y de usted, uno de mis tres lectores y medio, será la culpa, si no sale a votar. Carajo.

            Yo, le prometo, estoy haciendo lo que me toca. Escribir, por ejemplo… Pero evitar que estos «caballos de Troya», «compenetren», de nuevo, en el contexto político de nuestro Estado, es tarea de absolutamente todos los veracruzanos de bien. Los que no viven, vivimos, de las dádivas y las limosnas. De las promesas incumplidas, de los que tenemos el INE al día, para ejercer nuestro derecho y nuestra OBLIGACIÓN cívica, de acudir a las urnas…

            No quisiera que ninguno de esos rastreros «caballos de Troya» entren, nuevamente, a destrozar la vida social, política, cultural y etcétera, de mi Estado.

            Y nada más.

DERECHOS DE AUTOR
Esta información pertenece a su autor original y fue recopilada del sitio https://www.diarioelmundo.com.mx/index.php/2023/10/02/la-caballada-esta-flaca/?utm_source=rss&utm_medium=rss&utm_campaign=la-caballada-esta-flaca