Noticias de Hoy
Los mejores medios en uno solo

review en español, características y precio

452

Es difícil mirar más allá de Apple, Samsung y Xiaomi en la gama premium, pero hay una familia de smartphone que, año tras año, consigue llamar mi atención. Son, en efecto, los Google Pixel, los móviles diseñados por la compañía de Mountain View que desde siempre han destacado por su apartado fotográfico y sus funciones de software tan atractivas. Este año no iba a ser diferente. El Pixel 8 Pro continúa apostándolo todo a la cámara. También al software, ahora con múltiples funciones potenciadas por IA. 

El nuevo buque insignia de, además, llega con alguna que otra novedad interesante, pese a que simple vista parece una ligera actualización del Pixel 7 Pro. De hecho, en muchos aspectos lo es. El Pixel 8 Pro Google mantiene prácticamente el mismo diseño, la misma configuración de cámara y la misma pantalla. Pero en cada uno de esos apartados hay ligeros cambios que hacen que uno de los móviles con mejor cámara del mercado, sea todavía mejor. 

  • La cámara, por ejemplo, se ha mejorado con un nuevo sensor de 50 megapixeles. Mantiene, eso sí, el ultra gran angular de 48 megapixeles, así como el sensor teleobjetivo también de 48 megapixeles
  • Tiene prácticamente el mismo diseño, pero incluye nuevos colores y un cambio que, en mi opinión, es importante: la doble curvatura en la pantalla ya no existe. 
  • Mantiene la misma diagonal de pantalla, así como la misma resolución, pero con un brillo aún mayor (de 1.500 nits con picos de hasta 2400 nits frente a los 1.000 nits de brillo del Pixel 7 Pro.

A esto, además, debemos sumarle un nuevo procesador, el Tensor G3, así como a las múltiples mejoras adicionales tanto de software como de hardware que llegan frente al Pixel 7 Pro, como las funciones de la cámara potenciadas con IA, los 7 años de actualizaciones o el termómetro incorporado o una batería de mayor capacidad. 

Ahora bien, debemos tener en cuenta un factor relevante: el precio. El Pixel 8 Pro sale a la venta por 1099 euros. Es decir, cuesta 200 más que el Pixel 7 Pro, cuyo precio oficial es de 899 euros. Teniendo en cuenta que su antecesor podría bajar de precio de forma considerable en los próximos meses, me surge la duda de si es recomendable pagar lo que cuesta el nuevo móvil de Google a cambio de tener las mejoras que ofrece. O si, por el contrario, es mejor apostar por el modelo del año pasado o por alguno de sus rivales, como podría ser el Samsung Galaxy S23 Ultra, el Xiaomi 13 Pro o el iPhone 14 Pro

Diseño y pantalla: pequeños cambios

Pantalla del Google Pixel 8 Pro

Son, probablemente, dos de los apartados en los que apenas hay cambios. De hecho, y a no ser que estés muy familiarizado con los móviles de Google, es muy difícil distinguir un Pixel 8 Pro de un Pixel 7 Pro. La parte posterior es prácticamente idéntica a la de su antecesor. Destaca por su extravagante módulo fotográfico y por ese cristal en acabado mate que ahora llega en nuevos colores, como en un azul pastel o en un tono bautizado como cerámico. 

La compañía, no obstante, ha realizado algunos cambios que son muy bienvenidos. El frontal ahora es completamente plano, y sus esquinas son ligeramente redondeadas. Es algo que se agradece, pues la doble curvatura de la pantalla, si bien aportaba una estética más elegante cuando está completamente apagada, hacía que la experiencia a la hora de visualizar contenido no fuese la ideal, como cuando se reproducían tonos blancos se creaba un ligero sombreado en los bordes.

La pantalla del Google Pixel 8 Pro, de hecho, es excelente en todos sus aspectos. Se trata de un panel OLED de 6,7 pulgadas con una resolución de 1344 x 2992 píxeles. Cuenta, además, con una tasa de refresco de 120 Hz, así como un brillo de 1.500 nits que puede alcanzar picos de 2400 nits. Eso sí, debemos tener en cuenta una serie de factores. El primero, es que la resolución que viene por defecto no es la completa, sino que se incluye de fábrica de 1008 x 2244 píxeles (el equivalente a Full HD). Por suerte, es posible activar la resolución QHD+ a través de los ajustes del sistema. Los tonos de la pantalla, además, son un pelín frios para mi gusto, y en este caso no hay opción para ajustar los colores, como sí encontramos en smartphones de otras marcas.

Tensor G3: la potencia no es lo importante

Parte trasera del Google Pixel 8 Pro Parte trasera del Google Pixel 8 Pro

Muchas de las novedades que llegan con el Pixel 8 Pro funcionan gracias a su procesador, el Tensor G3. Este, curiosamente, no compite frente a los SoCs más potentes de fabricantes como Qualcomm o Apple. Al menos, no en potencia. En concreto, las pruebas de rendimiento muestran que, pese a que ha mejorado respecto al Tensor G2, no está a la altura del chip A17 Pro de los iPhone 14 Pro o del Snapdragon 8 Gen 2 que vemos en algunos de los buques insignias de Samsung y Xiaomi. 

Y esto es algo que Google ha reiterado en diferentes ocasiones. En una publicación, la compañía afirma que el procesador Tensor “nunca se ha centrado en velocidades y avances, ni en métricas de rendimiento tradicionales”. Ojo, esto no quiere decir que el rendimiento del Pixel 8 Pro sea malo. Es, en líneas generales, excelente. Pero el SoC de Google va un poco más allá.

Tensor se centra en las tareas de aprendizaje automático, que son necesarias para poder ejecutar algunas de las características y funciones más destacables de este teléfono. Y más concretamente, se encarga de ejecutar funciones de IA generativa que son, según afirma la compañía, hasta 150 veces más complejas que las que encontramos en el Pixel 7 Pro.

DERECHOS DE AUTOR
Esta información pertenece a su autor original y fue recopilada del sitio https://hipertextual.com/2023/10/google-pixel-8-pro-analisis