Marcelo sorprende a miles de personas con su nuevo talento… baterista en un concierto de Thrity Seconds for Mars!

Marcelo a lo largo de su carrera ha interpretado la melodía de uno de los mejores Real Madrid de la historia blanca. Aunque todavía faltaba verlo interpretar una melodía con un ritmo diferente como lo hizo en el festival Lollapalooza de Brasil cuando fue a ver el concierto del grupo estadounidense de rock alternativo Thirty Seconds for Mars. Una oportunidad que no desaprovechó para mostrar a miles de personas su nuevo talento.

Sorpresa en escenario del Lollapalooza

Estaba arrancando el concierto cuando el cantante, Jared Leto, interactuaba con el público que abarrotaba el festival de música en Brasil. Un momento en el que aprovechó para ponerse una camiseta de la canarinha, pero en su espalda tenía grabado un nombre de un jugador especial para ellos y que estaba viendo el concierto: Marcelo.

El lateral de 36 años no se lo pensó dos veces y se subió al escenario principal del Autódromo de Interlagos, en São Paulo. Equipado con sus modernas gafas de sol, ropa informal y unas baquetas que hacían presagiar que el futbolista hoy no iba a subir con la banda de música californiana solo para saludar al público brasileño que estaba presente para verles.

Una colaboración especial

Justo en ese momento el vigente campeón de la Copa Libertadores con el Fluminense de Río de Janeiro cogió el micro para desatar la locura entre el público: “Me dicen que tienen que prometerles que hoy se volverán locos“. Una frase que desató los gritos y los aplausos del público presente, aunque no fue lo único a lo que se atrevió, ya que también tuvo que hacer en algún momento de traductor de Jared Leto.

Aunque el gran momento no se hizo de esperar. Tras una foto con el público, el exjugador del Real Madrid ocupó su posición en el escenario delante de un instrumento de percusión para tocar una de las canciones del grupo junto con todos sus componente. El tema elegido fue “Stuck”, que forma parte del álbum “It’s the End of the World but It’s a Beautiful Day’.

No se le dio nada mal. Marcelo siguió el ritmo con la batería y chocó las baquetas para animar a dar palmas a los miles de brasileños que arroparon el escenario principal. Una imagen especial en plena pretemporada con el Fluminense, después de haber caído en las semifinales del Campeonato Carioca frente al máximo rival, el Flamengo.